Bastantes son los rituales navideños que nuestro país comparte con otros, con una que otra variación, como es el adornar un pino, montar un pesebre, cantar villancicos, cenar en familia, enviar tarjetas de saludos de manera física o virtual, etc. Pero en algunos lugares han adoptado tradiciones que para Chile pueden ser un tanto curiosas.
CORONEL SANDERS PASCUERO
Un clásico infaltable para muchos japoneses durante estas fechas es comer pollo frito del restaurant de comida rápida KFC, incluso la franquicia por esos lados tuvo que crear promociones especiales para la ocasión, lo que incrementa sus ventas hasta 10 veces más de lo normal, entre el 20 y 25 de diciembre de cada año.
¿Pero, de dónde nace esta tradición? Algunos dicen que la instauraron los extranjeros que se encontraban en Japón para esas fechas, al ser incapaces de encontrar un pavo navideño para celebrar, optaban por el sabor familiar de los famosos pollos.
Otro cuento dice que a comienzos de los años 70s un jardín de infantes cristiano ordenó comida al restaurant para agasajar a sus niños, y que esta idea se fue replicando año a año, de escuela en escuela.
En realidad, a esta altura nadie tiene mucha certeza de cómo nace este hábito, lo único seguro es que desde 1974 es todo un clásico en el país asiático, donde las personas a veces hacen fila por horas para conseguir su cena navideña.
PATO DONALD, PERSONAJE NAVIDEÑO
Todos conocemos al famoso personaje de Disney, amigo de Mickey Mouse, llamado Pato Donald, pero poco sabemos de lo importante que es para los suecos en la víspera de navidad.
Desde 1954 se emite en Suecia, cada 24 de diciembre a las 15:00 hrs., un especial de una hora de dibujos animados, donde Donald es el protagonista absoluto. Desde esa época es un imperdible en esas tierras, ubicándose entre los 2 programas más vistos del día.
Hace un tiempo quisieron acabar con esta tradición, pero la respuesta de la gente fue el mantener al aire a “El pato Donald y sus amigos le desean una Feliz Navidad”, por ser un momento de unión generacional.
REGALOS DESDE UN TRONCO
Para los catalanes el “Tió de Nadal” es una tradición antigua e infaltable. Consiste en decorar un pequeño tronco o rama gruesa, hacerle una cara amable, taparle con una manta y dejarle comida en las noches. Se debe crear desde el primer día del periodo de adviento.
En esta tradición familiar, los adultos deben poner los regalos de los niños bajo la manta del Tió en noche buena. Al día siguiente, los pequeños cantan villancicos a su alrededor, incluyendo la típica canción de este ritual llamada “Caga tió”, mientras golpean el tronco para que supuestamente defeque los regalos, que suelen ser sólo dulces y turrones, pues los regalos grandes llegan el 6 de enero con los Reyes Magos.
ÁRBOL DE TELARAÑAS
En el siglo XIX nace el ritual ucraniano de decorar el pino navideño con telarañas, escondiendo entre las ramas una araña de juguete. El niño que encuentre el arácnido será afortunado todo el año, recibirá un regalo extra y podrá tener el honor de abrir sus presentes antes que el resto el 6 de enero, fecha en que se celebra la navidad ortodoxa, religión que profesan en su mayoría las personas de ese lugar del planeta.
La leyenda cuenta que una pobre viuda no tenía como montar un pino con sus hijos pequeños para conmemorar el nacimiento de Jesús, entonces se le ocurre decorar el árbol que está en frente de su cabaña con algunas nueces y frutas que poseía.
Esa noche, las arañas que habitaban el árbol tejieron una frondosa telaraña alrededor de este, la que a la mañana siguiente se convirtió en hilos de oro y plata, cambiando la suerte de la familia.
