Fin de semana en Mendoza: Bueno, Bonito y Exquisito
La ciudad Argentina es siempre una excelente opción para un viaje de pocos días.
Un fin de semana en Mendoza es una clásica escapada entre los chilenos, pues es cosa de llegar a Los Andes y cruzar la cordillera en bus o vehículo particular (entre 6 y 8 horas dependiendo si sales de Viña/Valparaíso o Santiago y del tiempo que tome el paso por la Aduana) o tomar un vuelo. Nosotros en esta ocasión optamos por primera vez por la vía aérea, un vuelo Sky Airlines que nos costó casi lo mismo que cuesta un bus Cata (línea Argentina).
Aparte del tiempo en el aeropuerto, el vuelo es ridículamente corto, alrededor de 35 minutos y unas vistas hermosas de la Cordillera de los Andes. Una vez aterrizados en El Plumerillo o Aeropuerto Internacional Francisco Gabrielli, tienes varias opciones para llegar al centro de la ciudad, que se encuentra bastante cerca: comprar una tarjeta SUBE ahí mismo (como la BIP de Santiago) y tomar el bus 680, que es lo más económico. Ahora, si quieres más comodidad y que te dejen en la puerta de tu alojamiento, puedes pedir un Uber que tiene un lugar reservado para dejar y recoger pasajeros, o tomar un taxi, que están afuera de la salida, con un valor de ARS$1400, casi $4.000 CLP.
En materia de alojamiento, nos quedamos en el Abril Hotel Boutique, ubicado en calle Patricias Mendocinas. Tiene buen precio, habitaciones limpias y correctas, atención amable y un pequeño desayuno compuesto de las clásicas facturitas, pan, dulce de leche, mermelada, cereales, té, café y jugo.
Como un fin de semana ya sea largo o corto es poco tiempo, tomar el City Bus Mendoza es una excelente opción para conocer lo principal de la zona. Puedes comprar tus tickets en internet o bien ir a la Plaza de la Independencia donde está la salida del transporte y un kiosko de venta. Para turistas, el valor es de ARS $4.000 (unos $11.000 CLP). Existen 10 posibles paradas donde puedes bajar y continuar luego el recorrido en los siguientes buses (hop on-hop off, cada una hora o 35 minutos los fines de semana). A lo largo del viaje, los guías cuentan sobre la historia de cada lugar, lo que lo hace más interesante. Algunos de los atractivos a recorrer son la Casa Museo de San Martin, La Enoteca, la Calle Arístides Villanueva (lugar ideal para pasear, comer y salir de noche), el Serpentario y el hermoso Parque San Martín con dos paradas, en la Fuente de los Continentes y el Cerro La Gloria. En este último punto las vistas son muy lindas y encontrarás placas conmemorativas y un imponente monumento a la independencia. Para las personas que gusten del senderismo, subir este cerro a pie es ideal. Por otra parte, tener en cuenta que los museos en domingo abren a las 14 hrs. y los lunes se mantienen cerrados, en general.
Para nadie es un secreto que la gastronomía argentina es una maravilla, y los precios -al momento que se escribe esta nota- son bastante favorecedores para los chilenos, así que comer en Mendoza es un deleite en todo sentido. Nosotros preferimos varios lugares reconocidos para las comidas: el buffet clásico de la ciudad ubicado en Chile con Las Heras, Caro Pepe. Por ARS $3000 (bebidas aparte a ARS $350) puedes comer literalmente de todo, carnes, pastas, ensaladas, postres; otra opción es Pizzaiolo, un hermoso restaurante ideal para pizzas -como dice su nombre- sandwich, pastas de primera y con variadas opciones para celiacos; El club de la Milanesa, que es una franquicia a nivel nacional, una perfecta ocasión para probar estas tradicionales preparaciones trasandinas. Los platos son excesivamente grandes y a un muy buen precio; en el caso de los postres un gelato por esos lados nunca falla, pero nuestra recomendación es ir a Lucciano’s (también franquicia), no se van a arrepentir.
Para pasear, su gran cantidad de plazas son un imperdible, en especial la ya mencionada Independencia y la España, que destaca por sus preciosos mosaicos. Caminar por la peatonal Sarmiento también es una buena decisión, en especial si buscas un lugar para un buen café o un helado, y, por supuesto, recorrer la avenida San Martín, el corazón del centro.