Siete películas de terror mexicanas que no te debes perder
Cintas dirigidas por realizadores como Arturo Riptein, Carlos Enrique Taboada, entre otros.
El cine de terror mexicano ha dejado una huella indeleble en el género, ofreciendo una mezcla inconfundible de mitos, leyendas y realidades sociales que resuenan tanto en su propio país como a nivel internacional. Desde los clásicos de los años 50 y 60, como “El Vampiro” de Fernando Méndez, hasta propuestas contemporáneas como “Huesera” de Michelle Garza, el horror mexicano ha sabido combinar lo sobrenatural con lo culturalmente relevante. Con cineastas como Guillermo del Toro, quien explora lo macabro desde una mirada poética, y películas legendarias como “Hasta el viento tiene miedo” de Carlos Enrique Taboada, el cine de terror mexicano ha logrado consolidarse como una fuerza creativa y macabra. Si te interesa descubrir algunos filmes que han moldeado la identidad del horror en México y han aterrorizado a generaciones dentro y fuera del país, no te pierdas la siguiente lista.
El Escapulario (1968)
Si bien esta cinta es más un drama sobrenatural, siempre encabeza las listas de las mejores cintas de terror aztecas, porque a más de alguno se le eriza la piel al verla.
Esta joya está dirigida por Servando González, un polémico e innovador realizador, trata sobre una mujer en su lecho de muerte -en la época de la revolución mexicana- quien pide la extremaunción al joven nuevo cura del pueblo. Pero antes de recibir los santos óleos, le comparte la historia de un viejo escapulario que tiene guardado, el que ella define como milagroso si uno cree firmemente en el. Por esto, se lo entrega al sacerdote para que lo guarde, mientras le relata como esta pieza salvó la vida de sus hijos.
Filmada de manera poco convencional para la época, con planos innovadores, la mayoría amplios y llenos elementos, y con una fotografía impecable, vale la pena verla. Además, está protagonizada por grandes actores como Ofelia Guilmáin, Enrique Lizalde, Alicia Bonet, José Carlos Ruiz y Enrique Aguilar. Disponible en la plataforma gratuita de VIX.
Más Negro que la Noche (1975)
Cuatro icónicas actrices, quienes se convertirían luego en grandes divas de las telenovelas, protagonizan esta historia que, sin muchos efectos, logra causar bastante susto, se trata de Claudia Islas, Susana Dosamantes, la recientemente fallecida Helena Rojo y la gran Lucía Méndez.
En “Más Negro que la Noche”, dirigida por uno de los maestros del terror mexicano, Carlos Enrique Taboada, cuatro amigas se van a vivir juntas a una antigua y lujosa casa que ha heredado una de ellas por parte de una tía fastidiosa a la que no veía hace años. La única condición para recibir la herencia es cuidar de su fiel gato negro, Becker. A la sobrina le da igual el gato, no es problema la solicitud, pero a sus amigas no.
En un principio todo va relativamente bien en la casa. Una que otra cosa rara de pronto las inquieta, y las reglas de la estricta ama de llaves las molesta, pero luego de la muerte sorpresiva del gato todo empeora para las muchachas. Los ruidos extraños, las visiones fantasmales, no las dejarán vivir.
Uno de los puntos destacados de esta cinta que ha sido alabada por el público y la crítica, es la profundidad de sus temáticas, a través de los ojos de las protagonistas se habla de la amistad, el empoderamiento femenino, el duelo y como se enfrentar los miedos.
Ojo de no confundir este filme con un penoso remake realizado en 2014, el que intento darle un giro a la trama, convirtiéndola en un completo desastre.
Alucarda, La Hija de las Tinieblas (1977)
Alocada, sangrienta, sexual y en inglés, es esta realización de Juan López Moctezuma, protagonizada por Tina Romero, Claudio Brook (quien interpreta a tres personajes) y Lily Garza. Una obra psicodélica surrealista que bebe mucho del cine clásico de terror italiano, de las cintas de la Hammer y del trabajo de Alejandro Jodorowsky, de quien Moctezuma fuera colaborador.
En esta historia lésbica llena de simbolismos -desde el nombre de sus protagonistas, donde Alucard es Drácula al revés y Justine viene de una de las obras más desviadas del Marqués de Sade- conocemos como el mal se apodera de una joven huérfana que llega a vivir a un convento y de su nueva amiga, quien fue criada en ese lugar, esto luego de un encuentro con unos gitanos en un bosque. Ambas desataran la locura en el convento y entre ella mismas.
No apta para cualquier público, es considerada una cinta de culto. Absolutamente pagana, fuerte y estridente. Se puede ver en Youtube en baja calidad.
La Tía Alejandra (1980)
El premiado realizador Arturo Ripstein (Profundo Carmesí), nos regala una película donde la hechicería y el ocultismo toman protagonismo. Un matrimonio de clase media con hijos pequeños, reciben en su casa a la anciana tía del marido, quien supuestamente tiene mucho dinero. La mujer parece indefensa, cercana a sus últimos días de vida, hasta que muestra su verdadera esencia, después de que los niños se burlaran de ella, y mientras los padres la ven como una posible tabla de salvación a su situación económica. Todo lo que le hagan a la tía Alejandra lo pagarán muy, muy caro. La anciana se encierra constantemente en su pieza a realizar extraños rituales, y les enseña brujería a los más pequeños de la casa, todo con el fin de desestabilizar la paz del hogar y más…
Con un buen guion y prácticamente una locación, este filme logra una atmósfera de agobio para el espectador, y si bien tiene pocos y algo pobres efectos especiales, se le perdona porque aquí menos, es más, mucho más. No por nada es considerada de las mejores producciones del cine de terror mexicano y del mismísimo Ripstein.
Protagonizada por Isabel Corona, Diana Bracho y Manuel Ojeda.
Cementerio del Terror (1985)
Este clásico del cine de terror mexicano de los 80, dirigido por Rubén Galindo Jr. cuenta la historia de un grupo de adolescentes que, durante la celebración de Halloween, desentierran el cadáver de un peligroso asesino serial para realizar un ritual satánico. Lo que no saben es que este acto desata una ola de horror, trayendo de vuelta no sólo al psicópata, sino también a un ejército de zombies que comienza a acercarlos en un tenebroso cementerio.
Con un atmósfera tensa y efectos especiales que recuerdan al estilo del horror de serie B estadounidense y al cine de Lucio Fulci, Cementerio del terror mezcla elementos del slasher y el cine de zombies, aportando su propio toque con la inclusión de la mitología local, y una ambientación lograda que juega con el miedo a lo desconocido. Si bien tiene un montón de clichés del género, lo cierto es que destaca por un ritmo frenético y una siniestra ambientación. Imperdible para los amantes del cine de culto.
Vacaciones de Terror (1989)
Probablemente sea una de las películas más recordadas del terror mexicano, especialmente por la gran cantidad de memes que se realizan burlándose de sus malos efectos y actuaciones de risa, sin embargo, lo cierto es que este clásico del género guarda algunos elementos que son dignos de revisar. Dirigida por René Cardona III, la trama sigue a una familia que decide pasar unos días en una vieja casa de campo que acaban de heredar, sin saber que en el lugar habita el espíritu de una bruja maldita que fue quemada en la época de la inquisición. Cuando la hija pequeña descubre una muñeca olvidada en una cueva, el endemoniado juguete comenzará a hacer de las suyas.
Aunque a simple vista puede parecer una película de horror y comedia, lo cierto es que combina elementos tradicionales de casas embrujadas con un toque de horror sobrenatural y una atmósfera de constante amenaza. Sus limitaciones -propias de la época- le han ganado un estatus de culto, especialmente por su peculiar terror ligero, la famosa muñeca y la participación de Pedro Fernández, Julio Alemán y Gabriela Hassel. Curiosamente, la película obtuvo una secuela titulada “Vacaciones de terror 2: Noche de Brujas”, dirigida por Pedro Galindo III, que solamente trae de vuelta a Fernández del elenco original.
La puedes ver completa y en buena calidad a través de Youtube.
Mal de Ojo (2022)
Dirigida por Isaac Ezban, este thriller de terror explora el oscuro mundo de las brujas (algo habitual en las cintas mexicanas) y las maldiciones en un entorno rural. La historia sigue a Nala, una adolescente de 13 años que viaja con su familia a la casa de su abuela, buscando una cura para la extraña enfermedad de su hermana pequeña. En el lugar, la niña descubrirá secretos familiares perturbadores, incluyendo la presencia de un antigua y temible maldición. Lo que inicialmente parece un refugio, se convierte en un escenario de horror sobrenatural.
Al mezclar lo tradicional con lo moderno, Ezban logra crear una historia inquietante y contemporánea sobre la brujería y las consecuencias del “mal de ojo”, mientras -al mismo tiempo- trata temáticas familiares como el miedo a la muerte y la protección de los seres queridos. La película sobresale por una grotesca dirección de arte y la capacidad de generar tensión hasta un inesperado clímax final, que mantendrá al espectador al borde de su asiento. Un ejemplo sólido del terror mexicano actual, pero que también debe muchísimo a los clásicos.
La puedes ver en la plataforma de Prime Video.