“The Killer” de David Fincher: una mezcla entre El Agente 47 y “El Samurai” de Delon
El nuevo thriller para Netflix del director de “Se7en”, “The Game” y “Zodiac”.
De hecho, la figura del samurai de Delon, fue inspiración para que el escritor Alexis Nolent (conocido como “Matz”) escribiera la serie de cómics “The Killer”, que sigue los pasos de un frío asesino sin nombre. El director David Fincher y el actor Michael Fassbender, por su parte, encontraron que hacer una adaptación a la pantalla grande de las historietas, sería una genial oportunidad para poder llevar a este enigmático sicario al streaming, pero con algunos cambios y un estilo americanizado.
El argumento nos pone en los zapatos de un implacable asesino a sueldo, interpretado por Michael Fassbender, que pasa sus días matando por contrato a gente que no conoce, ni le interesa conocer. Es un personaje sin emociones, sin empatía, sereno e introspectivo, que para relajarse escucha canciones de The Smiths, y que cuando termina un trabajo es básicamente imposible de rastrear. Sin embargo, durante un encargo en París, un error le costará caro, por lo que tendrá que huir y tratar de sobrevivir de la organización que lo contrató en primer lugar. Su único ser querido será víctima de su equivocación, por lo que El Asesino irá detrás de todos los responsables.
Aunque David Fincher nos tiene acostumbrados a sus thrillers sobre psicópatas, asesinos e intrigas hiperrealistas como “Se7en”, “Gone Girl”, “Zodiac” y la serie “Mindhunters”, la gran diferencia de “The Killer” es su tono mucho más relajado y juguetón. Si bien la película tiene un ritmo lento, silencioso y metódico (como la propia mente de su protagonista), el filme abraza el cine de género con mayor entusiasmo desde los créditos iniciales. Se siente como un verdadero cómic en movimiento, con personajes sacados de historieta o un videojuego, de hecho, se podría decir que “The Killer” es la mejor versión del “Agente 47” de la saga de videojuegos “Hitman” que ha visto la pantalla grande. Fassbender cambia de vestimentas e identidades, de la misma manera que lo hace el implacable calvo del juego.
Y aunque el argumento de la película es algo sumamente ya visto (pero efectivo), como es la venganza, también profundiza en la personalidad del personaje y en lo que tuvo que pasar en su vida para terminar quitándosela a los demás, siempre con un humor negro que se agradece.
Por supuesto, la cinta también brilla en su apartado técnico, con una fotografía impecable a cargo de Erik Messerschmidt. Cada plano está perfectamente compuesto, como si de una viñeta se tratase. El color, por su parte, abarca una paleta de colores pasteles, muy similares a los utilizados en el poster de la cinta (y que emula, por su parte, a las portadas de las novelas negras).
La banda sonora de Trent Reznor y Atticus Ross, si bien no es impresionante como en otras ocasiones, es suficientemente orgánica y destaca -principalmente- en la increíble escena de pelea con “El Bruto”. Un momento especial dentro de la trama, por su apartado técnico y la impecable coreografía.
Quizás para quienes buscan un thriller adrenalínico como “John Wick” o una película de asesinos típica de Fincher, se sientan un poco estafados por su ritmo pausado. No obstante “The Killer” no deja de ser un gran filme de género, que no busca reinventar, sino homenajear y, por supuesto, entretener al ecléctico público del streaming.
La película original de Netflix ya está disponible en la plataforma.